Semana Santa
Semana Santa Infantil
La Semana Santa de Lucena es una manifestación singular y profundamente arraigada, cuyo pulso se mantiene vivo gracias a la participación constante de generaciones enteras. Entre sus expresiones más entrañables y originales destaca la Semana Santa Infantil, una celebración que cada año, el sábado posterior a la Pascua, convierte las calles de la ciudad en un auténtico semillero de fe, tradición y futuro cofrade.
Su origen se remonta al siglo XIX, cuando en 1855 Lucena y otras poblaciones cercanas sufrieron una grave epidemia de cólera. Como medida preventiva, los niños reprodujeron en pequeños cortejos las procesiones de los mayores, germen de lo que hoy conocemos como Semana Santa Infantil. Aquella iniciativa espontánea fue calando en la vida local y, ya en 1973, la Agrupación de Cofradías decidió organizar oficialmente un Concurso de Procesiones Infantiles, otorgando a cada participante una medalla conmemorativa ilustrada con el cartel oficial de la Semana Santa de aquel año. Esta costumbre, lejos de perderse, se mantiene hasta la actualidad como un gesto simbólico de reconocimiento a todos los pequeños que participan.
En 1985, la celebración dejó de tener carácter competitivo y adoptó la denominación de Desfile de Procesiones Infantiles ante Nuestro Padre Jesús Nazareno, ya que su itinerario incluye un momento central: el paso de los cortejos ante la Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno, una de las devociones más hondas de la ciudad. Tres años más tarde, en 1988, la organización del desfile pasó a manos de la Peña El Santero, entidad cultural que desde entonces se encarga de mantener viva esta tradición con enorme dedicación y cariño.
Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Cada año, más de un centenar de pasos procesionales infantiles, cuidadosamente elaborados, recorren las calles de Lucena portados a hombros por niños y niñas que reproducen la peculiar forma lucentina de procesionar: la santería. Con túnicas adaptadas a su talla, a cara descubierta y bajo la dirección de su propio manijero, los pequeños santeros imitan con precisión el movimiento característico de los tronos sobre el hombro, otorgándoles ese movimiento único que distingue a la Semana Santa lucentina. El cortejo lo completan niñas vestidas de mantilla, hermanos con sus insignias y tamboreros que marcan el ritmo del paso.
Todo ello da lugar a un desfile colorido y emocionante, seguido por miles de espectadores que se agolpan en las calles para contemplar la ilusión y la entrega de los más pequeños. La Semana Santa Infantil se ha convertido así en una auténtica escuela en la que los niños viven en primera persona el arte de la santería y aprenden valores como el respeto, la convivencia, el trabajo en equipo y el amor a sus tradiciones.
Además, esta cita tiene un fuerte componente familiar y comunitario. Padres, abuelos y hermanos mayores colaboran en la elaboración de los pequeños pasos, transmitiendo conocimientos, técnicas artesanas y, sobre todo, el sentimiento cofrade y santero que ha marcado a Lucena durante siglos. La Semana Santa Infantil asegura de este modo la continuidad de la tradición, sembrando en los niños la semilla de la fe y el compromiso que en el futuro les convertirá en santeros, mantillas, hermanos y pregoneros de la Semana Mayor.
En definitiva, la Semana Santa Infantil de Lucena no es solo un espectáculo entrañable y vistoso, sino un patrimonio vivo y dinámico que encarna la transmisión intergeneracional de la santería. Una celebración que emociona por la ternura de sus protagonistas y que reafirma, año tras año, que la Semana Santa de Lucena tiene futuro porque está sembrada en la ilusión de sus niños.

Concurso de Saetas 2018 – Archivo de la Peña El Santero

Fotografía de la Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Lucena
Peña El Santero
Origen y desarrollo Peña El Santero
La Peña El Santero fue constituida en 1982 bajo la presidencia de Antonio Cobos. Su primera sede, en la calle Juan Palma García, se concibió como un espacio polivalente con salón de actos, elementos de bar, exposición permanente y una rica muestra fotográfica de pasos procesionales, cuadrillas y santeros de la ciudad. Desde sus inicios destacó por la organización de conferencias dedicadas a la santería y por la creación del prestigioso Concurso de Saetas, que durante años premió tanto a los mejores cantaores como a las cuadrillas más sobresalientes, no exento en ocasiones de intensas polémicas.
En 1983 tomó la presidencia Gonzalo Angulo Vigo y en 1986 se trasladaron a una nueva sede más modesta, lo que supuso el inicio de una etapa en la que Fernando Díaz y Rafael Mármol trabajaron intensamente por la perpetuidad de la asociación. Sin embargo, la Peña no desapareció como tal: sus actividades continuaron en otros ámbitos del mundo cofrade lucentino, especialmente en la organización de procesiones infantiles, que se consolidaron como semillero de futuras generaciones de santeros.
La Misa del Santero, celebrada anualmente en el Santuario de Aras y organizada por la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli, se convirtió en una de las citas más significativas de la entidad en las que la Peña el Santero colabora. A partir de 2014, con la incorporación de Eduardo García López, se impulsó un registro de santeros y se constituyó una nueva junta de gobierno, inscrita en el registro municipal de asociaciones en 2017. Ese mismo año Eduardo García tomó la presidencia.
Exaltación de la Saeta y Concurso Nacional
En 2017 la Peña logró recuperar la Exaltación de la Saeta y el Concurso Nacional, desaparecido en 2002, eventos que se han repetido en años posteriores aunque sin periodicidad fija. En 2020, además, se relanzó con especial fuerza la procesión infantil, reforzando la vocación de la Peña como transmisora de la tradición a los más jóvenes.
La labor formativa y cultural de la Peña se diversificó en 2021 con el concurso-exposición ‘Lucena ilustra su Pasión y Gloria’, destinado al alumnado de infantil y primaria del municipio, promovido junto a la Delegación de Fiestas y la Delegación de Educación del Ayuntamiento de Lucena.
En 2022, con motivo de su 40º aniversario, la Peña organizó un amplio programa de actos que incluyó colaboraciones con la Hermandad de la Humillación (Servitas) y la Hermandad de Tambores de Lucena, además de conferencias, conciertos y homenajes que reforzaron su papel como referente de la vida cofrade.
Hoy, cuatro décadas después de su fundación, la Peña El Santero sigue siendo un pilar fundamental en la preservación y difusión de la santería, así como en el impulso de actividades culturales, musicales e infantiles que aseguran la transmisión de la Semana Santa lucentina a las nuevas generaciones.
Fuente Documental del texto: Notas para la historia de las cofradías lucentinas (Francisco López Salamanca – 2022)